Publica "Ciudad CCS":
El presidente boliviano Evo Morales volvió a fustigar la política ambivalente del secretario general de la Organización de Estados Americano (OEA), el uruguayo Luis Almagro, respecto de Venezuela, empleado a fondo contra el gobierno de Nicolás Maduro y su pasividad respecto a la erosión social, corrupción y crisis institucional en Brasil.
En el marco de un intercambio sostenido de pareceres respecto de la crisis en Venezuela y Brasil, Morales instó a Almagro a hacer valer su propuesta de “esquema institucional” para proteger, sobre todo, el voto universal en el país sudamericano.
“La mejor forma de defender el “esquema institucional” es hacer respetar al presidente electo con voto universal”, escribió el líder boliviano en su cuenta de Twitter.
La crítica tácita a Almagro, respecto de ambos países, se registró después de que Morales denunciara que su contradictor, que trata a Maduro de “dictador”, pergeña un ´Plan Cóndor´para la región, centrado en Venezuela, a cuyo Presidente legítimo quiere tumbar por su perfil antiimperialista.
En una entrevista de televisión, Almagro contestó, sin nombrar a Morales, que lo que tenía para Venezuela era, más bien un “antiplan Cóndor”, consistente en el restablecimiento de las instituciones democráticas y la liberación de presos políticos en el país caribeño.
Almagro se encuentra empeñado en aplicar la Carta Democrática de la OEA que canalizaría una intervención en Venezuela.
El Plan Cóndor fue una estrategia de las dictaduras del Cono Sur, sustentadas por Estados Unidos, para perseguir y asesinar a dirigentes de izquierda entre las décadas de los 70 y 80 del siglo pasado.
Morales fustiga que Almagro haya puesto en el centro de su mira a la Venezuela de Maduro y que responda, contrario a su mandato, a Washington.
El Presidente boliviano cargó también contra Almagro por su benevolencia con la crisis en Brasil, gobernado por el presidente Michel Temer, electo por el Congreso brasileño tras prosperar, según La Paz, un aciago juicio político que interrumpió el mandato de la presidente progresista Dillma Roussef, electa en las urnas por 54 millones de brasileños.
“So pretexto de cuidar y defender el ´esquema institucional” (para Venezuela), quieren proteger al golpe judicial, a la corrupción y a gobierno sin legitimidad (en Brasil)”, aguijonéo el tuit de Morales que no menciona a Almagro y tampoco a Temer como tales.
El gobierno de Temer, que enteró hace semanas un año en Brasil, se ha visto socavado por la corrupción y una suerte de ignición social.
La crisis en Brasil, cuya economía ha sufrido un fierte deterioro, se agudizó tras la aparición de una grabación en la que, supuestamente, Temer ordena esconder la corrupción campeante en la estatal brasileña Perobras.
Para sofocar una serie de violentas manifestaciones callejeras, Temer ordenó la salid del Ejército.
Las protestas contra en Brasilia y Rio de Janeiro, dejaron, hace 10 días, casi 70 civiles heridos a manos de la Policía y el Ejército.
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