El delantero venezolano da la victoria a un Alavés ultradefensivo. Gran debut de Hugo Duro (17años). Bojan y Enzo, diluidos.
Mucho hastío, poco fútbol y el gol de Santos que se lleva el tesoro del Coliseum. De Biasi fortificó al Alavés con una táctica antecesora al catenaccio, defensa de cinco con tres centrales y con los dos mediocentros a metro y medio. La jugada, tosca, le salió bien, si bien eso hizo que Bojan o Enzo Zidane, jugadores de toque, quedarán diluidos. Lo mejor del Getafe, con diferencia, fue el debut de Hugo Duro, un chaval de 17 años que lleva en el club desde alevines y que en el juvenil lleva diez goles en ocho partidos. De sus botas salió lo más exquisito de los azulones, como ese taconazo al borde del área asistiendo a Amath en el 91’ que casi acaba en el 1-1.
Bordalás y De Biasi hicieron rotaciones, sí, pero no tantas como se anunciaban en la víspera. Bordalás hizo debutar al portero argentino Emi Martínez, que llegó cedido en verano desde el Arsenal inglés. También a Olivera, lateral izquierdo uruguayo de 19 años e internacional Sub-20. En el Alavés, el que atrajo los focos fue Enzo, el hijo mayor de Zidane, que en Liga apenas ha tenido oportunidades (71 minutos) pero que De Biasi le brindó la titularidad. También llamó la atención de presencia de Diéguez en esa defensa de cinco con tres centrales que tanto le gusta al entrenador italiano.
Los porteros no vieron el balón de cerca hasta el minuto 19’, cuando una internada de Molinero hasta la línea de fondo pilló a la defensa visitante parada y solicitando un fuera de juego que no existía. Su pase atrás lo mandó altísimo Arambarri. En el 28’, Sivera sí tuvo que intervenir para placar un centro-chut de Chuli.
La única vez que intervino el portero del Getafe, Martínez, fue en el 29’, cuando Medrán disparó desde fuera del área con más intención que acierto.
En el 31’ Chuli pidió penalti por empujón de Maripán, quien sí es verdad que le puso el brazo en la espalda pero aparentemente no con el vigor para salir despedido con tanta fuerza como salió.
Ante la medida protectora de De Biasi de vigilar con tres centrales, Bordalás respondió no colocando a ningún punta de referencia. Chuli navegaba de aquí para allá, sin parar, lo que dificultaba que fijasen su marca.
Enzo verdeó perdiendo el balón con asidua facilidad. Ni a él ni a Bojan le ayudaba el estilo de juego del Alavés. Sirva como dato clarificador que la primera vez que el Alavés metió un balón en el área del Getafe fue en el 63’, una falta lejana colgada que remató a duras penas Santos.
En el 64’ llegó el momento más esperado por la parroquia local: el debut de Hugo Duro, un chaval de 17 años que lleva en el club desde alevines y que en el juvenil lleva diez goles en ocho partidos.
El Alavés, más por empuje que por juego, fue encerrando al Getafe a base de faltas y córners. Todo ello desde el momento en que salió al campo el delantero venezolano Santos. Hasta que marcó.
Mucho hastío, poco fútbol y el gol de Santos que se lleva el tesoro del Coliseum. De Biasi fortificó al Alavés con una táctica antecesora al catenaccio, defensa de cinco con tres centrales y con los dos mediocentros a metro y medio. La jugada, tosca, le salió bien, si bien eso hizo que Bojan o Enzo Zidane, jugadores de toque, quedarán diluidos. Lo mejor del Getafe, con diferencia, fue el debut de Hugo Duro, un chaval de 17 años que lleva en el club desde alevines y que en el juvenil lleva diez goles en ocho partidos. De sus botas salió lo más exquisito de los azulones, como ese taconazo al borde del área asistiendo a Amath en el 91’ que casi acaba en el 1-1.
Bordalás y De Biasi hicieron rotaciones, sí, pero no tantas como se anunciaban en la víspera. Bordalás hizo debutar al portero argentino Emi Martínez, que llegó cedido en verano desde el Arsenal inglés. También a Olivera, lateral izquierdo uruguayo de 19 años e internacional Sub-20. En el Alavés, el que atrajo los focos fue Enzo, el hijo mayor de Zidane, que en Liga apenas ha tenido oportunidades (71 minutos) pero que De Biasi le brindó la titularidad. También llamó la atención de presencia de Diéguez en esa defensa de cinco con tres centrales que tanto le gusta al entrenador italiano.
Los porteros no vieron el balón de cerca hasta el minuto 19’, cuando una internada de Molinero hasta la línea de fondo pilló a la defensa visitante parada y solicitando un fuera de juego que no existía. Su pase atrás lo mandó altísimo Arambarri. En el 28’, Sivera sí tuvo que intervenir para placar un centro-chut de Chuli.
La única vez que intervino el portero del Getafe, Martínez, fue en el 29’, cuando Medrán disparó desde fuera del área con más intención que acierto.
En el 31’ Chuli pidió penalti por empujón de Maripán, quien sí es verdad que le puso el brazo en la espalda pero aparentemente no con el vigor para salir despedido con tanta fuerza como salió.
Ante la medida protectora de De Biasi de vigilar con tres centrales, Bordalás respondió no colocando a ningún punta de referencia. Chuli navegaba de aquí para allá, sin parar, lo que dificultaba que fijasen su marca.
Enzo verdeó perdiendo el balón con asidua facilidad. Ni a él ni a Bojan le ayudaba el estilo de juego del Alavés. Sirva como dato clarificador que la primera vez que el Alavés metió un balón en el área del Getafe fue en el 63’, una falta lejana colgada que remató a duras penas Santos.
En el 64’ llegó el momento más esperado por la parroquia local: el debut de Hugo Duro, un chaval de 17 años que lleva en el club desde alevines y que en el juvenil lleva diez goles en ocho partidos.
El Alavés, más por empuje que por juego, fue encerrando al Getafe a base de faltas y córners. Todo ello desde el momento en que salió al campo el delantero venezolano Santos. Hasta que marcó.
https://as.com/futbol/2017/10/24/copa_del_rey/1508877297_572436.html
No hay comentarios:
Publicar un comentario