Publica "Diario Noticias":
17 aficionados del Milagrés fueron identificados por la Policía Foral de Tafalla en el transcurso del partido que su equipo jugaba ante el Cárcar en Milagro, correspondiente al grupo 3 de Primera Regional, tras verter insultos racistas contra el árbitro, de raza negra. El colegiado no ha presentado denuncia, aunque los hechos podrían ser tramitados como sanción por la vía administrativa.
Pese a que no pudieron identificar a los autores de los gritos, desde la grada se escucharon expresiones como “negro de mierda” o “puto negro”.
El árbitro, Youssouf Mahamat Ahmat, tuvo que suspender diez minutos el partido durante la primera parte y solicitar al delegado de campo que identificara y expulsara a quienes le habían ofendido. El colegiado redactó lo sucedido en el acta. “El partido ha sido detenido en el minuto 28 de la primera parte durante 10 minutos debido a insulto racista (negro) del público local a mi persona. El delegado del campo, José Ignacio Escala, pudo expulsar al responsable sin poder identificarle, ni a mí ni a la Policía Foral, que vino y estuvo hasta el final del partido, incluso para acompañarme hasta mi coche”.
En el descanso del partido, dos integrantes del citado grupo se dirigieron al vestuario para disculparse, hecho que de momento ha motivado la no interposición de denuncia por presunta infracción a la Ley Foral 15/2001 del Deporte de Navarra. En el acta del partido lo hizo constar: “En el descanso, dos personas sin identificar estuvieron en los vestuarios. Cuando pregunté al delegado quiénes eran, este último les expulsó y luego me comentó que vinieron para disculparse de la incidencia. Con el ánimo de personas responsables, jugadores, incluso las disculpas del delegado del campo, decidí terminar el partido sin suspenderlo”.
en el campo, sin incidencias Por lo demás, el partido entre Milagrés y Cárcar se desarrolló en el campo sin incidencias más allá de ese parón de diez minutos y terminó con triunfo del equipo local por 1-0, gracias a un tanto conseguido en el último minuto.
El presidente del Milagrés, Gregorio Martínez, señaló que “no pasó nada en el campo. Desde donde yo estaba no se escuchó ningún grito, pero cuando el árbitro nos dijo lo que pasaba, fui a pedirles a los aficionados que se fueran a otra parte. Tenemos buena relación con el Cárcar y en el campo no pasó nada”. Por su parte, el presidente del Comité Navarro de Árbitros, Luis González Obregozo, lamentó que “se repitan estos hechos tan lamentables. Estamos a principio de temporada y esperamos que sirva de aviso para que no se vuelva a repetir un episodio parecido”.
Pese a que no pudieron identificar a los autores de los gritos, desde la grada se escucharon expresiones como “negro de mierda” o “puto negro”.
El árbitro, Youssouf Mahamat Ahmat, tuvo que suspender diez minutos el partido durante la primera parte y solicitar al delegado de campo que identificara y expulsara a quienes le habían ofendido. El colegiado redactó lo sucedido en el acta. “El partido ha sido detenido en el minuto 28 de la primera parte durante 10 minutos debido a insulto racista (negro) del público local a mi persona. El delegado del campo, José Ignacio Escala, pudo expulsar al responsable sin poder identificarle, ni a mí ni a la Policía Foral, que vino y estuvo hasta el final del partido, incluso para acompañarme hasta mi coche”.
En el descanso del partido, dos integrantes del citado grupo se dirigieron al vestuario para disculparse, hecho que de momento ha motivado la no interposición de denuncia por presunta infracción a la Ley Foral 15/2001 del Deporte de Navarra. En el acta del partido lo hizo constar: “En el descanso, dos personas sin identificar estuvieron en los vestuarios. Cuando pregunté al delegado quiénes eran, este último les expulsó y luego me comentó que vinieron para disculparse de la incidencia. Con el ánimo de personas responsables, jugadores, incluso las disculpas del delegado del campo, decidí terminar el partido sin suspenderlo”.
en el campo, sin incidencias Por lo demás, el partido entre Milagrés y Cárcar se desarrolló en el campo sin incidencias más allá de ese parón de diez minutos y terminó con triunfo del equipo local por 1-0, gracias a un tanto conseguido en el último minuto.
El presidente del Milagrés, Gregorio Martínez, señaló que “no pasó nada en el campo. Desde donde yo estaba no se escuchó ningún grito, pero cuando el árbitro nos dijo lo que pasaba, fui a pedirles a los aficionados que se fueran a otra parte. Tenemos buena relación con el Cárcar y en el campo no pasó nada”. Por su parte, el presidente del Comité Navarro de Árbitros, Luis González Obregozo, lamentó que “se repitan estos hechos tan lamentables. Estamos a principio de temporada y esperamos que sirva de aviso para que no se vuelva a repetir un episodio parecido”.
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