Leemos en "El Siglo"
Voceros del Gobierno aseguran que Venezuela “se encamina hacia la construcción de un nuevo modelo económico basado en lo productivo”, que busca “atender la demanda nacional” y, a su vez, perfilar al país como una nación con potencial exportador, generando con ello “nuevas fuentes de ingresos de divisas”, distintas a las que se obtienen por el petróleo, entre ellas la exportación de vehículos.
El objetivo, según el equipo económico del Ejecutivo, es salir adelante de la coyuntura en la que se encuentra Venezuela, producto del desplome de los precios del petróleo, que representaban el 96% de ingresos en divisas y que hasta ahora han disminuido el mismo a menos del 70%.
Teniendo como meta diversificar las fuentes de exportación y elevar el potencial del sector, se creó el “Motor Industrial” del Consejo Nacional de Economía Productiva enfocado en el desarrollo de la industria automotriz nacional, para abastecer mercados regionales.
Se pretende alcanzar el máximo nivel de producción del año 2007 cuando se ensamblaron 172.418 unidades.
Con miras a exportar
Esta iniciativa se impulsó en 2015 con la instalación en el país de la fábrica de autobuses Yutong con una inversión de Bs 3 mil millones y $278 millones.
En la planta se han ensamblado y comercializado más de 600 unidades de transporte de tres modelos distintos: businterurbano diesel (de 54 puestos), busurbano diesel y gas (34 puestos) y minibús diesel y gas urbano (25 puestos).
“La planta fue diseñada y proyectada para que, una vez que tengamos la mayor capacidad de producción, podamos incluso exportar las unidades, saliéndonos así del rentismo petrolero”, manifestó el ministro para Transporte Terrestre y Obras Públicas, Luis Sauce.
Afirman que cuando la instalación esté en plena actividad producirá 3.500 autobuses al año, por día 14 unidades.
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